Cómo evitar lesiones en el gym

Ir al gimnasio se ha convertido en una actividad esencial para mantenerse en forma. Ya sea en solitario o en compañía es una oportunidad única de desconexión del estrés laboral del día a día.

Sin embargo, esta tensión diaria puede también afectar a nuestros músculos y provocarnos una lesión bastante dolorosa. Las partes del cuerpo que con más frecuencia se dañan a lo largo de un entrenamiento se concentran en las lumbares, la cadera, el hombro o la rodilla. Entender nuestro organismo es clave para evitar futuros traumas.

Las causas por las que los deportistas se lesionan en su gran mayoría podríamos dividirlas en las siguientes categorías:

• Levantar un peso superior al que estamos acostumbrados.
• Entrenamientos de una duración a las que nuestro cuerpo no está acostumbrado, como puede ser el caso de pasar de un training de 30 minutos a uno de 2 horas de un día para otro.
• No estar equipados ni con un calzado adecuado para el entrenamiento ni de ropa cómoda.
• Errores técnicos a la hora de realizar los ejercicios.

Ha llegado la hora de desmitificar frases como “no pain, no gain” y empezar a actuar en consonancia a las señales que nos manda nuestro cuerpo. Recuerda que la mejor manera para evitar lesiones en el gimnasio es no forzar la maquinaria y evitar ignorar el problema. A continuación vamos a proporcionarte algunos consejos que serán de tu utilidad. Evitarán que veas el deporte como un sufrimiento en lugar de una diversión.

Consejos para prevenir lesiones típicas en el gimnasio

Es importante que si eres un/a inexperto/a en el entrenamiento en el gym te dejes asesorar por el personal del gimnasio en el que te encuentres. Dicho esto, queremos darte una serie de recomendaciones que consideramos fundamental que tengas en cuenta a la hora de practicar deporte.

1. Calienta y estira durante los primeros 5 minutos. No es un mero trámite. Debes prestar la atención que se merece a este apartado. Tu cuerpo te lo agradecerá.
2. Incrementa el peso en tus ejercicios de resistencia de manera gradual. No debe de superar el 5 por ciento de una vez a otra.
3. Deja un día de descanso entre las sesiones de entrenamiento. Recuerda que estas tienen que contar con una duración menor de 60 minutos.
4. Periodiza la intensidad de los ciclos de trabajo. Si sientes dolor para inmediatamente y no fuerces más tu cuerpo.
5. Cuida la postura de tu espalda. Procura tener la espalda en una posición cómoda y una buena alineación corporal de la misma.
6. No concentres tu entrenamiento en una sola actividad. Añade varias disciplinas a tu rutina de ejercicios. Recuerda que deben de complementarse entre ellas.
7. Aliméntate de forma correcta y bebe agua, sigue los consejos que te pueda dar un nutricionista sobre qué alimentos son los que mejor se adaptan al tipo de ejercicio que vas a realizar. Y por supuesto, bebe agua antes y después de entrenar. Es importante mantenerse hidratados para evitar mareos y pérdida de sales minerales.

En Club Gym Sierra contamos con un equipo dispuesto a asesorarte tanto si eres un iniciado en el ejercicio como un amante del deporte. Y recuerda “mens sana in corpore sano”.