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Cómo respirar en el agua correctamente

Cómo respirar en el agua correctamente

4 Sep 2024 - Publicado en Noticias

Principiantes o nadadores expertos, cualquier nadador debe saber que la respiración es fundamental para realizar los ejercicios de forma correcta. Dominar la técnica de cómo respirar al nadar no solo mejora tu rendimiento en los ejercicios de piscina, sino que también te permite disfrutar de una experiencia más fluida y segura. A continuación desarrollamos la técnicas y los errores más comunes que debes evitar para saber respirar en el agua.

Técnicas de respiración en natación, mejorando el rendimiento

Si tu objetivo es mantener un ritmo constante y evitar la fatiga, estas son algunas de las técnicas que debes seguir para respirar mientras haces ejercicios en piscina.

  • Respiración bilateral: esta técnica consiste en alternar el lado por el que respiras después de cada brazada, por ejemplo, cada tres o cinco brazadas. Esto ayuda a equilibrar el cuerpo y reducir la tensión en el cuello y los hombros.
  • Exhalar bajo el agua: cuando exhalas completamente mientras la cabeza está bajo el agua, al sacar la cabeza para inhalar, puedes hacerlo de manera rápida y eficiente. Esta técnica es fundamental para mejorar cómo respirar natación.
  • Control del ritmo: intenta mantener un ritmo constante en tu respiración, sincronizándola con tus brazadas. Esto te ayudará a mantener la calma y a conservar energía, lo que es esencial para nadar largas distancias sin agotarte.
  • Posición del cuerpo: mantén una postura horizontal y alineada en el agua. Girar ligeramente el cuerpo al respirar permite que la boca quede justo fuera del agua, minimizando la resistencia y evitando que tragues agua.

Errores comunes al respirar en el agua y cómo evitarlos

Aunque puede parecer sencillo, aprender cómo respirar en el agua de forma eficiente requiere práctica y atención a los detalles. Como por ejemplo, la postura o el ritmo que lleves en el ejercicios. Además, debes evitar:

  • Levantarte demasiado para respirar: uno de los errores más frecuentes es levantar demasiado la cabeza para tomar aire. Esto provoca un desequilibrio en el cuerpo, aumenta la resistencia en el agua y puede causar dolor en el cuello. La solución es girar suavemente la cabeza hacia un lado, dejando solo la mitad de la cara fuera del agua.
  • Contener la respiración: muchos nadadores novatos tienden a contener la respiración bajo el agua, lo que provoca una acumulación de dióxido de carbono en los pulmones y hace que la siguiente inhalación sea más difícil. En lugar de eso, exhala constantemente mientras estás bajo el agua, para que cuando saques la cabeza solo necesites inhalar.
  • Respiración irregular: no tener un ritmo de respiración consistente puede generar fatiga rápidamente y afectar tu rendimiento. Practica contar las brazadas y establece un patrón de respiración que funcione bien para ti, ajustándolo según la intensidad de tu entrenamiento.
  • Tragar agua: esto ocurre cuando no exhalas completamente bajo el agua o cuando respiras demasiado tarde. Para evitarlo, asegúrate de exhalar todo el aire antes de girar la cabeza para inhalar, y mantén una buena sincronización entre tu respiración y tus brazadas.

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